Agua Buena
Asociación de
Derechos Humanos

San José Costa Rica
Teléfonos: (506) 2280-3548
P.O.Box: 366-2200 Coronado







Necesitas un lugar donde quedarte 
en San José?

Tenemos habitaciones para alquiler, más información aquí.


Patrocina:

 

Artículos

Sección: Honduras
Publicado: Abril 2007

¿Cuánto Se Ha Avanzado En Realidad En Torno Al Acceso A Tratamiento Antirretroviral?

Por Xiomara Sierra y Lidice López Tocón*
Agua Buena Pro Defensa de los Derechos Humanos
Abril 2007

La información oficial del Departamento de ITS y VIH /SIDA de la Secretaría de Salud de Honduras señala que en el primer trimestre del año 2006, se realizaron las compras del 70% de los medicamentos que se necesitan para el Programa de Tratamiento Antirretroviral (TARV) a nivel nacional. De acuerdo a la Secretaría de Salud, estos medicamentos cubrirían las necesidades de las PVVS hasta finales del presente año. Esta información es alentadora, ya que parece indicar que el Gobierno de Honduras estaría asumiendo paulatinamente el costo del Programa. Por otro lado, versiones oficiales comunican también el increíble descenso de los índices de mortalidad en personas que viven con VIH y SIDA (PVVS), de 43% al 10%, gracias al incremento del acceso a TARV.

No obstante a los esfuerzos realizados, todavía existen otros factores que dificultan el crecimiento y sostenimiento del Programa de atención a personas que viven con VIH y SIDA (PVVS) que trastocan el optimismo inicial que nos transmite la Secretaría de Salud. Entre ellas:

1. Costos anexos al acceso a TARV. Si bien la Secretaría de Salud de Honduras, con el apoyo financiero del Fondo Mundial, ha podido poner los ARV a disposición de las PVVS, el acceso a ellos está lejos de ser gratuito.

Los usuarios de TARV deben pagar una “cuota de recuperación” al asistir a una consulta, recoger sus medicamentos o someterse a una prueba de CD4; esta cuota puede ir entre 20 y 1000 lempiras (1.1 y 52 dólares americanos) y es un desaliento para las PVVS que se encuentran en pobreza y extrema pobreza. A ello, es necesario añadirle el costo de transporte ya que los centros de salud que brindan atención para PVVS se encuentran en las ciudades con mayor prevalencia, lejos de las zonas rurales.

En algunos casos, señalaron miembros de la Asonapvsidah –Asociación Nacional de Personas Viviendo con el Vih/Sida-  capitulo de San Pedro Sula,  cuando las urgencias económicas familiares impiden que la PVVS asista a su cita habitual o a recoger sus medicamentos, son “castigados” por el servicio y deben regresar cada siete (7) días para recoger la  provisión de medicamentos, es decir deben gastar de donde no tienen.

En otros casos la persona que no puede pagar “queda en mora” y tendrá que pagar las cuotas acumuladas cuando pueda dándose casos de llegar a acumular demasiadas cuotas  que se vuelven impagables, por la extrema pobreza de las PVVS.

Es comprensible por qué el índice de abandonos se ubica en un 8% -según una médica tratante-  y por qué durante el trimestre pasado, alrededor de 20 personas dejaron de recoger su tratamiento -según las PVVS que se atienden en el Hospital del Tórax. Comprendemos entonces, por qué la adherencia se ubica alrededor del 86% y no arriba del 90% como es recomendable.

¡Esto no debe seguir pasando!  Existe evidencia de que los cobros de consulta, los costos de transporte y otros costos anexos a la atención, contribuyen negativamente a la adherencia. Es urgente que se supriman todos los costos de la atención, así como que se descentralice a todos los establecimientos de salud de las zonas rurales y alejadas.

2. Continúan las demoras en pruebas de CD4 y Carga Viral.  En Honduras, las pruebas de conteo de linfocitos CD4 y Caga Viral (CV) pueden significar la diferencia entre la vida y la muerte. En muchos hospitales, es necesario contar con el resultado de CD4 para iniciar el TARV. Si los resultados tardan algunas semanas –como de hecho sucede-, la PVVS puede fallecer en la espera. Si se trata de PVVS en tratamiento, cuya evolución debe ser monitoreada a través de esta prueba, suele ser frecuente que las muestras de sangre se extravíen, que no haya reactivos para procesarlas o que los resultados no lleguen a la historia clínica.

Se nos informó que a partir del mes de marzo, se ordenó a los hospitales que compren los reactivos para las pruebas de CD4. En el caso de las pruebas de CV, contamos con la información de que luego de ocho meses,  la máquina que procesa las pruebas había sido reparada. Sin embargo, esto aún no se traduce en un acceso real a los resultados por parte de las PVVS que llevan esperando varios meses.

¿Qué hace falta para que el sistema de salud atienda estas necesidades? ¿Por qué no se obedecen los criterios clínicos para iniciar el TARV?, ¿Por qué el Gobierno Central no asume las compras de reactivos para pruebas de CD4, de manera tal que se reduzcan los precios? La Secretaría de Salud está siendo bastante negligente al dejar esta situación sin una rápida solución.

3. Limitado Acceso a medicamentos de segunda línea. Hasta febrero del presente año, Honduras tenía una lista de pacientes en espera de recibir tratamiento de segunda línea. Gracias a una donación de Kaletra® (medicamento que combina lopinavir/ritonavir) de parte de Laboratorios Abbott, esta necesidad estaría cubierta temporalmente. Sin embargo, ni éste ni otros medicamentos de segunda línea están incluidos en el cuadro básico de medicamentos –o lista de medicamentos esenciales-, lo que impide “legalmente”, que el gobierno compre estos productos y dé sostenibilidad a estos tratamientos iniciados.

Todos los ARV deben estar en  el cuadro básico de medicamentos incluyendo los medicamentos de segunda línea. Si esto no sucede, estarían echando a la suerte la vida de muchas PVVS que eventualmente necesitarán utilizar estos medicamentos.

4. Las pruebas de genotipo también constituyen un reto. Las pruebas de genotipo o fenotipo para identificar a qué medicamento se ha hecho resistente el virus y pronosticar qué ARV sería el más adecuado para ser incorporado en la terapia no están accesible para las PVVS en Honduras. Solamente 115 PVVS han sido sometida a estas pruebas con apoyo de la colaboración de La Cooperación Sueca, sin embargo esto no ha cubierto toda la demanda actual.

No todas las PVVS necesitan esta prueba, sino solo aquellas en las que el incremento de la carga viral o la reaparición de infecciones oportunistas indican una falla en la terapia y una posible resistencia, lo cual es determinado por el médico tratante. 

Sin embargo, la ausencia de estas pruebas en el país no debe significar de NINGUN MODO un obstáculo para el cambio de terapia de un usuario a medicamentos de segunda línea. Existen guías que permiten evaluar clínicamente cuándo un paciente no está respondiendo a una terapia y ésta debe ser modificada. NO PODEMOS ESPERAR QUE UNA PVVS MUERA PARA DETERMINAR QUE HABÍA HECHO RESISTENCIA A LA TERAPIA.

5. Interrupción de tratamiento y medicamentos por vencer. Se han reportado rupturas de stock de la combinación de zidovudina y lamivudina en el último semestre, según señaló una médico tratante en Tegucigalpa. Por otro lado, varias PVVS señalan que recibieron provisiones de medicamentos para dos o tres meses de medicamentos que vencerían en marzo 2007 y deben tomarlos hasta fines de abril.

Estas interrupciones de tratamiento o sobre-stocks de algunos medicamentos responden a una variedad de razones; pero generalmente se producen por errores en las estimaciones de necesidades –cuántas pastillas se van a necesitar- y en último caso, conlleva a una pérdida de recursos.

Para dar solución a estas situaciones, es necesario contar con información actualizada y de calidad sobre la situación de los tratamientos a nivel nacional, considerar los nuevos ingresos a tratamiento previstos, las existencias en almacenes y las fechas de vencimiento.

6. Deficiente Prevención de la Transmisión Vertical: En una visita a un hospital de San Pedro Sula, los médicos encargados de atender a niños y niñas que viven con VIH, nos señalaron que además de los 350 niños que tenían en tratamiento, registraban entre 5 y 8 nuevos casos al mes. Esto es resultado de una bajo índice controles prenatales, un tardío diagnóstico en las mujeres gestantes, una atención de la infección tardía o interrumpida y una deficiente atención del parto.

Honduras, con una epidemia generalizada, debe vigorizar sus estrategias de prevención de la transmisión vertical, fomentar la educación en prevención del VIH entre hombres y mujeres y promover la realización de la prueba en mujeres gestantes y sus parejas.

7. Inestabilidad laboral del equipo de atención. Parte del personal de salud que brinda atención a PVVS es contratado por el proyecto del Fondo Mundial. Hasta la actualidad, este contrato se ha realizado cada trimestre, poniendo en riesgo la estabilidad laboral del personal; además, se han denunciado pagos retrasados por parte del receptor principal, lo cual vulnera los derechos de cualquier trabajador. Pero la situación de inestabilidad se debe principalmente a que el Gobierno aún no ha decidido asumir en su planilla de trabajadores a este personal,  ni ha presentado un plan para realizarlo.

¿Acaso el único médico contratado por la Secretaría de Salud podrá atender a 400 niños? ¿Es que el gobierno no piensa honrar su compromiso asumido con el Fondo Mundial?

En síntesis, Honduras ha dado algunos pasos importantes para mejorar la calidad y la cobertura en los tratamientos Antirretroviareles, pero aun queda un largo camino por recorrer para garantizar un efectivo e integral acceso a los servicios de salud para las PVVS.  Mantengamos el optimismo, pero acompañémoslo de respuestas rápidas y sólidas que se traduzcan en una mejor atención para todas las personas que viven con VIH y SIDA.


*Agua Buena Human Rights Associacion
www.aguabuena.org
e-mail: rastern@racsa.co.cr
Tel/Fax: 506-2280-3548

Lidice Lopez:
lidilt@hotmail.com
506-2280-9905

 

© 1999-2001 Babroo Producciones
Diseñada y mantenida por Jorge Angulo